RUTA 5:  LAS CALDERAS

 

CARACTERÍSTICAS

Longitud: 14 km ida y vuelta.
Duración: 5-6 horas.
Altura mínima: 1.850 m (Peña Aguda)
Altura máxima: 2.049 m (pico Campiña)
Dificultad: Media.
Recomendaciones: llevar agua y merienda o una ración de alimentos energéticos. Calzar botas de montaña. Es importante vestir pantalones y usar protección solar y contra el viento.
Cartografía: Mapa Topográfico Nacional de España, I.G.N., E: 1/25.000, Hoja 278-III (Laguna Negra).

 

RECORRIDO

      La primera parte de la ruta es la misma que en la ruta 4. Partiendo del mirador de San Francisco nos dirigimos hacia la laguna de las Pardillas y sin llegar a ella ascendemos por la arista de la montaña que hay a su derecha. Al ir ganando altura progresivamente se van divisando a la izquierda las lagunas de las Pardillas, Patos y Brava y a la derecha la laguna Negra y su circo glaciar. Si no abandonamos la arista llegaremos al punto más alto, donde se halla el llamado Mojón del Muelle, un conjunto cúbico de piedra, que señala la cima del pico Campiña de 2049 m de altura. Las vistas desde este punto son extraordinarias, se divisan perfiles de las sierras de la Demanda, Urbión, Cameros y Cebollera. Hay que seguir la vereda que discurre bordeando el perímetro del circo. El sendero va descendiendo muy ligeramente hasta alcanzar una vaguada. Bajando por el lado izquierdo de la vaguada, se llega a una espesa zona de monte bajo de brezos. Hay que seguir la estrecha senda que discurre entre la espesura, es fundamental vestir pantalón largo y calzar botas de montaña. Diversos montones de piedras a modo de hitos van indicando el camino. En menos de una hora se llega desde el borde del circo hasta las Calderas. Una vez allí hay que ir recorriendo todas las calderas. Empezando por las que se hallan más al sur y ascendiendo hacia el norte. Se recomienda descender hasta el pequeño cañón, formado por el agua, por su lado oeste. Una vez en el cañón hay que ir recorriendo la senda sin desanimarse porque se vuelva angosta o por que haya que trepar alguna roca, penetrar en alguna cueva, ascender por alguna gatera, etc. Sin lugar a dudas es lo mejor de la visita a este hermoso paraje. Si no se va con un conocedor del cañón es posible que no lo disfrute en toda su extensión.

   Tras deleitarnos con las extraordinarias formaciones rocosas habrá que desandar todo el camino para volver al punto de partida.